- 23 noviembre, 2022
Cuatro pasos para utilizar adecuadamente los estrobos
Los estrobos son una herramienta básica de manejo de material y son los que se utilizan con más frecuencia en la actualidad. Ofrecen una opción resistente, confiable y económica para la mayoría de operaciones de izaje. Su popularidad crece por las diferentes configuraciones disponibles para emplearse en una amplia variedad de aplicaciones.
A pesar de que los estrobos son herramientas muy confiables y seguras, existen procedimientos correctos para utilizarlos y así reducir al máximo la posibilidad de accidentes. A continuación, conoce los pasos para emplear los estrobos de forma correcta.
1. Elección del tipo de estrobo
Al seleccionar el tipo de estrobo adecuado para dar el mejor servicio, existen cuatro características que se deben considerar la cual publicamos anteriormente y puedes visualizar dando clic aquí.
2. Antes de la carga
Verifica que el estrobo esté asegurado correctamente alrededor de la carga y que el peso y el equilibrio de esta hayan sido determinados con precisión. Si la carga está en el piso, no permitas que sea arrastrada, ya que podría dañar el estrobo. Si la carga ya está descansando en el estrobo, asegúrate antes del izaje que este no tenga daños.
3. Colocación en el gancho
Luego, ubica el gancho directamente encima de la carga y coloca el estrobo en el gancho. Esto proporciona al operario la máxima eficiencia de izaje sin doblar el gancho o sobreestresar el estrobo.
4. Elevación de la carga
Una vez que el estrobo está sujeto de forma apropiada, evita la carga súbita absorbiendo con lentitud la distensión del estrobo. Aplica la energía con cuidado para evitar tirones al inicio del izaje, y acelera o desacelera con suavidad. Luego, verifica la tensión del estrobo. Eleva la carga algunos centímetros, detente y verifica que haya un equilibrio adecuado. De igual manera, comprueba que el trayecto esté libre de objetos.
Una vez que las operaciones de izaje se hayan completado, limpia el estrobo, revisa si no tiene daños y almacénalo en un lugar limpio y seco. Lo mejor es colgarlo en un rack o en la pared.
En CABSA podemos asesorarte a elegir la adecuada para tu proyecto.